“Macho Pelión”

Omar Fernando Mejía Agüero
2 min readFeb 17, 2021

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Con el caminado atrofiado y la mirada desorientada transita la verada todos los días buscando el incipiente sabor del vodka en su boca desgarrada. Parece una sombra que se tambalea a la orilla del camino que da dos pasos hacia adelante y uno hacia atrás. Es lento, como cualquier persona que haya vivido más de la mitad de su existencia bebiendo. Conocido como “macho pelión”, es un habitual entre las 3 y las 4 pm en la carretera entre Guápiles y el pueblo de Bella Vista. Su apodo, obtenido después de grandes batallas donde ganó más cicatrices que duelos. Él, un símbolo de la desgracia y la miseria, del fracaso de la vida. Todas las personas del barrio alguna historia tendrán con él, pocas positivas. Vive en una pequeña casa en medio de una finca ganadera. Desde lejos, su chimenea herrumbrada pasa encendida desde las primeras horas del día. El humo es muy negro, algo común de la leña que todavía guarda humedad. No hay señal de grandes riquezas ni de apreciada compañía. Tal vez, lo único, el ladrido de un perro atado a una cadena vieja, una suerte desgraciada, como la de su “amo”. Qué será del futuro de este viejo perturbado me pregunto. Su compañera hace tiempo lo dejó, cansada de sus borracheras y ciclos de violencia. Macho pelion, es un típico personaje del barrio rural que ha quedado atrapado entre su pasado olvidado y el presente acelerado. Es un villano y una víctima de nunca encontrar lo que parece que siempre ha buscado en la carretera entre las 3 y las 4 pm.

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